A través de una resolución, Sara Vidal, fiscal de la Primera Fiscalía Supraprovincial Corporativa de Lavado de Activos, decidió iniciar una investigación preliminar contra Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, por el presunto delito de lavado de activos, en el que se encuentra inmerso Joaquín Ramírez, ex secretario general del partido fujimorista.
Según el diario nacional Correo, la fiscal tomó en cuenta la investigación realizada por dos despachos anti-lavado, los cuales indagan los ingresos irregulares de la Sra. Fujimori.
Se cree que, durante la campaña del 2011, la lideresa de Fuerza Popular habría entregado US$ 15 millones al ex secretario general para proceder con el supuesto lavado de los mismos. No obstante, el destino final de aquel monto sería la “inversión” de estos en la cadena de grifos dirigida por Osías Ramírez, actual congresista fujimorista y hermano del mismo Joaquín Ramírez.
Entre otros sustentos presentados en la resolución de la fiscal Vidal, se encuentra la adquisición de dos inmuebles por parte de Joaquín Ramírez. Estas propiedades ascienden a los US$ 2 millones. Dichas propiedades eran utilizadas como locales de campaña y para realizar operaciones de la ONG Oportunidades, la cual pertenece a Keiko Fujimori.
Cabe precisar que, hace algunas semanas se levantó el secreto bancario y tributario del Sr. Ramírez, para así esclarecer el motivo de su desproporcionada fortuna personal. Como se sabe, el ex secretario general inició su carrera empresarial con Capricornio Import S.A.C., la cual contaba con un capital de apenas 2,000 soles. En la actualidad, el monto de su fortuna no ha podida ser determinada por las autoridades, a pesar de haber transcurrido dos años de investigaciones.