El pasado martes 23 de enero, el presidente venezolano Nicolás Maduro, anunció estar dispuesto a participar en los comicios presidenciales previstos para el mes de abril, si así lo decidiera el partido de gobierno: el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Sin embargo, se sabe que su postulación es inminente y que su candidatura se oficializará el 04 de febrero en el “Gran Congreso de la Patria”, convocado por el mandatario. “No les voy a fallar. Asumo la candidatura presidencial para el período 2019-2025 (…); seré el candidato de la clase obrera venezolana y seguiré siendo el presidente de los humildes”, manifestó.
La desaprobación del 70% con la que cuenta el presidente parece no intimidarlo ni significar una eventual derrota, todo lo contrario, él ha manifestado su deseo para que las elecciones se lleven a cabo lo más pronto posible. “Si estuviera en mis manos, las haría este domingo (..); le pido al Poder Electoral que fije la fecha más cercana para salir de esto, ganar las elecciones y empezar a hacer una gran revolución necesaria del 2018. Vamos a salir de esto de una buena vez”, dijo Maduro.
Por otro lado, y como era de esperarse, existe una gran cantidad de venezolanos que no están de acuerdo con la reelección de Maduro, puesto que lo consideran el principal culpable de la hiperinflación y escases de alimentos y medicinas. Asimismo, la oposición advirtió que es probable que el gobierno adelante los comicios para aprovecharse de las divisiones que está sufriendo la coalición opositora Mesa de la Unión Democrática (MUD) y que, a su vez, este restringirá qué candidato puede competir. Hasta el momento, no se sabe qué candidato presentará la oposición, pero Henry Falcón, exgobernador de Lara, se ha mostrado decidido a postular.